Si alguien me pidiera un consejo sobre Miami , ciudad soleada y calidad dosnde las haya, es que… se traiga un jersecito. Da igual la epoca del año, y aunque aquí en el invierno, los dias mas crudos no bajan de los 15 grados, que se lo traiga.
En un país donde los médicos son un lujo carísimo y por nuestro paracetamol de a un euro, te soplan fácil veinte dolares, es verdademraente un extraño riesgo sanitario ( osea económico ) lo que hacen estos señores con lo del aire acondicionado.
Te metes a cualquier Starbuks anhelando un café con hielo ,sudoroso del calor húmedo de la calle y a los pocos minutos, mientras esperas tu turno para pedir, empiezas a dudar si mejor casi, pedir uno de caldero , bien calentito y con chorro de coñac para así que el tembleque se te frene.
Y cuando entras al banco para abrir una cuenta corriente y te hacen sentarte, o has sido prevenido y has cargado con el jersey del que hablo, o al rato reniegas de los intereses , las tarjetas y el juego de sartenes con tal firmar rápido y de salir de ahí antes de que que la pulmonía que casi puedes ver como te acecha irremediablemente, te agarre por cada lado de tu sorprendido cuerpo, que no puede acostumbrarse a tanto cambio de temperatura a lo largo de un mismo día.
Me pregunto si para estos americanos lo del termino medio les parece algo de blandengues ( iba a decir una "mariconada" pero seré policamente correcto ) y necesitan demostrar su identidad nacional exagerándolo todo al extremo; ¿Qué se ha levantado un buen dia y hace cierto calorcito? Pues venga, que se note el poderio y te vas a enterar que te voy a poner el aire acondicionado a casi la temperatura de la congelación de agua. Y si para ello tengo que gastar yo solito la energía eléctrica de un pueblo de cualquier otra parte del mundo, durante una semana, lo hago y te callas, que esto es América.
Un dato: en la casa donde vivo, es paradójico, hace tanto frío siempre que tengo que abrir la ventana para que el calor de la calle entre y lo compense un poco. Y por supuesto me he tenido que comprar el jersey para ponérmelo… dentro. Y mi compañero es Cubano, pero debe de ser que lo de la cultura del derroche se pega rápido
Parafraseando a Axteris… están locos estos Americanos
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